Bodega Can Feliu

Hice una visita muy completa a la Bodega Can Feliu, en Porreras.

Actualmente la dirigen los 3 hermanos Feliu: Juan, Carlos y Xavi. Cada uno tiene unos estudios y una función diferente en la bodega.

En este artículo os quiero hablar de la experiencia que viví en esta preciosa finca con viñedos y ecoagroturismo.

Os cuento todos los detalles a continuación…

 

CERTIFICACIÓN DEMETER

 ✅ Nada más llegar, nos encontramos con un grupo de personas que también habían contratado la visita. A los pocos minutos apareció Juan Feliu, que sería quien nos acompañaría en todo momento.

Juan arrancó la visita con una interesante explicación sobre sus antepasados, nos contó que empezaron a producir vino en 1794. Durante 100 años se trabajó haciendo vino en botas donde se fermentaba y posteriormente se vendía a granel. Hasta que en 1895 la producción del vino se paró a causa de la plaga de la filoxera,  un insecto procedente de Estados Unidos, que atacaba a las raíces de las plantas, lo que provocó una epidemia. La industria volvió a resurgir a partir de los años 20 a base de injertar las variedades autóctonas en pies americanos, para que fueran resistentes a la filoxera. A partir de los 80 empezó la revolución de la producción del vino, ya que ahí controlaron el frío para controlar las fermentaciones con extracciones en mejores condiciones. Hasta el año 1999 no volvieron a sembrar vino, a partir de este año, se iniciaron poco a poco con pocas hectáreas. Empezaron con una certificación ecológica hasta que en el año 2003 tuvieron el primer vino. Durante 6 años fueron incrementando el número de variedades y hectáreas y presentándose a algún concurso, ganando bastantes premios. En el 2010 se certificaron como productores biodinámicos, eso significa que exigen que estén certificados como productores ecológicos, que tengan animales para poder hacer el compost, productos homeopáticos para vivificar el suelo y mejorar la fertilidad,… que a la vez no usen gelatinas animales, polvos de colas de pescado, ni añadir taninos, a penas contienen sulfitos (que es el conservante natural, pero a la vez son los causantes del dolor de cabeza cuando se toma vino en grandes cantidades), un vino comercial suele llevar unos 300-320 mg de sulfitos por litro, en cambio los ecológicos suelen llevar menos de la mitad y los vinos biodinámicos tan sólo llevan unos 80-90mg/l.

 Han obtenido la certificación Demeter, que garantiza su calidad biodinámica. Con respecto a la producción agrícola no usan insecticidas químicos, la poda y la vendimia las hacen a mano para que no empiece a fermentar en el camión si se hace de manera mecánica.

La primera parada es para ver los restos del despalillado, proceso de elaboración del vino, meten la uva en una cámara durante 24horas y luego la introducen en una máquina donde separan la parte leñosa de la uva y deja sólo las bayas. Estos restos se pueden usar como abono o para dar de comer a los cerdos.

La siguiente parada son las cámaras y una interesante explicación de la elaboración del vino. Donde pude probar un vino en tránsito, es decir que está fermentando, y tiene algo de levadura, de ahí el color blanco, y también contiene carbónico. Fue una experiencia muy diferente, de sabor me recordó al mosto, dulzón, pero sin llegar a ser tan dulce.

Otra de las paradas fue en los tanques donde hacen la fermentación y otra la sala de barricas de roble, donde nos explicó los dos tipos de barricas que tienen y como funciona la microoxigenación.

 

Antes de ir a la cata, Juan Feliu nos explicó el proceso de etiquetado y del corcho, la verdad es que estaría horas escuchándole, explica muy bien y se nota que es un apasionado del vino.

Algo que me llamó mucho la atención es que ellos no hacen vinos tintos jóvenes, los envejecen todos.

La visita guiada duró poco más de 1hora, después salimos al porche  de la entrada, desde donde se pueden ver los viñedos. Ahí nos esperaban unas mesas repletas de galletas de aceite, ibéricos, pan, aceitunas y queso. Y empezamos con la cata de sus 4 mejores vinos (origen IGP Vi de la Terra Mallorca)… primero probamos el Blanc d’Alens, luego el Rosat d’Alens, a continuación el Alè d’Alens (coupage: Cabernet, Sirà y Merlot), y el Alè de Sirà. Soy una enamoradiza del buen vino, pero nunca suelo hacer mucha mención sobre los que tomo, eso es debido a que sé diferenciar muy bien el buen vino, pero mis gustos sobre la variedad, entre otras cosas, pueden diferir mucho de otros paladares (en la cocina es mucho más sencillo). Por eso os diré que estos que probé me gustaron todos, pero más concretamente el Alè de Merlot que probé en la cena (18’50€, porque soy más de tinto y concretamente de la variedad de uva Merlot), eso sí el blanco y el rosado también se llevaron toda mi atención (y he de decir que en mi día a día no suelo beber ni blanco ni rosado).

Estoy deseando probar la selección premium de vinos Bullfish. Me llevé a casa un tinto, un blanco y un rosado. En cuanto los pruebe, ¡os lo cuento! Pero son tan exclusivos que estoy esperando el momento perfecto para degustarlos…

✅ A continuación pasamos a una zona con carpa donde nos esperaban para disfrutar de una suculenta barbacoa con entraña, picanha, solomillo de ternera, alitas, costillas, salchichas, chorizo, sobrasada, butifarrón… además de ensaladas, trempó, patata asada,verduras, pan, fruta, ensaimada de albaricoques, tarta de manzana, helado,… Era un buffet muy variado y de gran calidad. Además de poderlo disfrutar frente a un precioso paisaje de campo ambientado con los espectaculares colores del anochecer. Aquí la bebida va a parte, las botellas de vino tienen precio de bodega, las copas son 3€, cerveza 2€, refrescos y agua 1’50€. También había una zona para mojitos.

Durante toda la cata y la cena estuvimos perfectamente atendidos por el Sumiller Jesús Javaloyas, que nos aconsejó a la perfección en todo momento. También conocimos a Carlos y a Javi Feliu. Muy pendientes y atentos en todo momento. La verdad es que fue una velada increíble y estoy deseando, no sólo repetir, sino también ir con mis amigos y familiares, para que también puedan disfrutar de la misma experiencia que tuve yo.

 


 

Dirección: Camí de sa Serra, km 1,2  · Dentro del ecoagroturismo de Can Feliu · Porreras · Mallorca (No es fácil llegar, aquí os dejo las Coordenadas GPS: 39º52’91”, 3º03’08”)

Teléfonos de contacto: +34 971 944 153 / +34 971 168 078

Móviles de contacto: +34 606 397 620 (Xavi) / +34 609 613 213 (Carlos)

Mail: bodega@canfeliu.es

Página web de las bodegas: clica aquí.

Horario: de Abril a mediados de Noviembre.

Servicios: Para la visita se suelen hacer grupos por idiomas, en inglés o en castellano/mallorquín. Tienen el certificado de calidad biodinámica Demeter. Han conseguido muchos premios que avalan la calidad de sus vinos.

Ofrecen diferentes opciones de visitas tanto para grupos como para particulares, que normalmente son los viernes, a no ser que se solicite una cata personalizada:

  • Degustación de 4 vinos con aperitivos (15€).
  • Catas privadas para grupos con aperitivos o comidas (precio a consultar).
  • Visita guiada a la bodega con cata de 4 vinos con aperitivos y cena con BBQ en el hotel (Viernes noche, 36€). Ésta fue mi experiencia!!! Fantástica!!!
  • Precio copa de vino durante la cena: 3€

 

 


Adictaalacarta

2 Comentarios
  • Alfonso Guervós Macias

    12/09/2023 at 17:32 Responder

    Estaria interesado en adquirir cuatro entradas para un ticket regalo. Me gustaria saber el procedimiento ( si me envian un bono regalo después de realizar el pago o si lo hacen a través de correo o e-mail) Puesto que es un regalo me gustaria mas la primera opción. No se el día exacto en que a los interesados les gustaría asistir a la cata/cena, pòr lo que tambien necesitaria saber hasta cuando tienen abierto.
    Gracias

    • Adictaalacarta

      14/09/2023 at 07:38 Responder

      Hola Alfonso, debes contactar por teléfono con las bodegas, yo soy bloggera gastronómica. Gracias!

Siéntete libre de dejar un comentario sobre esta entrada ;-)